Pon a tostar el ajonjolí removiendo constantemente con cuidado de que no se queme. Cuando esté dorado, retíralo de la sartén.
2
Con ayuda de una procesadora de alimentos, agrega el ajonjolí, el aceite de oliva y una pizca de sal. Procesa en distintos intervalos hasta formar una pasta de ajonjolí tostado. Reserva para después.
3
En la batidora o manualmente, coloca la crema de leche o nata para montar a velocidad media hasta formar picos firmes.
4
Agrega la pasta de ajonjolí tostado y la miel. Con ayuda de una espátula o batidor, homogeniza.
5
Distribuye en el molde y agrega los topping de tu preferencia.
6
Congela durante toda la noche o hasta que solidifique por completo.